Parece obvio pero no lo es, leer mejora la escritura de cualquiera. Todos los escritores y talleristas que han publicado manuales, o que han escrito o hablado sobre el proceso de escritura y el oficio, lo afirman. Acá les ponemos unos cuantos ejemplos de cómo leer mejora la escritura.
Lo primero es pensar por qué escribimos, por qué los seres humanos creamos idiomas y empezamos a escribir. Fue para comunicarnos, para contarnos cosas, primero de forma oral y corporal y después de forma escrita. Nos contamos cosas que descubrimos, sentimos, pensamos y/o imaginamos. Siendo esto así, escribimos por las mismas razones, queremos comunicar lo que sabemos, sentimos, pensamos y/o imaginamos. Nos valemos del lenguaje para ello y nos apoyamos en lo que otros seres humanos nos han contado.
Si consideramos esto, entendemos por qué leer mejora la escritura, pero hagamos una pequeña lista para abogar por la lectura como práctica fundamental del escritor o escritora:
- El lenguaje, el idioma. Leer mejorará nuestro conocimiento del idioma, es importante que un porcentaje importante de nuestras lecturas sean en nuestro idioma. No es que las traducciones no nos aporten es sólo que la traducción viene de estructuras distintas, porque los idiomas no se construyen igual a la hora de escribir.
- La forma narrativa. Cuando pensamos en cómo contar lo que sea que queramos contar, es bueno tener referencias de cómo se hace. Piensa rápido en un libro que de verdad te guste o importe. Piensa por qué es así. Es porque supieron contarte algo. Un descubrimiento, una historia, un proceso de investigación, un pensamiento, todo tiene formas de comunicarse y es importante conocerlas y leerlas, vivirlas para tener una mejor idea de cómo quieres contar lo que sea que estés escribiendo.
- Inspiración. A veces, cuando leemos algo, las ideas vienen a nuestra cabeza, porque nos falta información, porque no exploraron un aspecto que nos interesa, porque no contaron lo que a mí se me ocurrió. Aunque no lo crean, esto ha dado origen a grandes descubrimientos, y a historias muy bien contadas.
Esto es muy sencillo, leer mejora la escritura porque son parte del mismo proceso de comunicación del ser humano, así que traten de leer mucho y de todo. Un escritor editor me dijo una vez que al menos deberíamos leer al año una mezcla de géneros (poesía, novela, cuento, relato, crónica, teatro, ensayo, etcétera), de clásicos y contemporáneos, probablemente predominará nuestro género favorito pero que no descartemos la inspiración de lo ajeno.
Aura Espitia Muñoz Cota